Fuente: http://www.baarty.com
Toda
persona que haya trabajado en hostelería sabe que es un trabajo muy sacrificado
porque requiere muchas horas. Esto es aún más cierto si hablamos del
propietario o el administrador de un bar, ya que deben pasar mucho tiempo
comprobando que todo vaya bien.
Para
que esto no se convierta en algo difícil de llevar con el tiempo, como
propietario o administrador de un bar debes desarrollar la habilidad y la
voluntad de delegar trabajo en otras personas, y que estas labores sean hechas
de forma eficiente.
Aprender
a delegar y hacerlo bien no sólo aliviará la carga de trabajo al encargado de
un bar sino también es muy probable que si no delega tareas del negocio,
éste no podrá alcanzar los niveles de éxito a los que podría llegar.
Esto
implica que probablemente al final del día se quedarán muchas cosas sin hacer.
Lamentablemente, las tareas diarias se convierten usualmente en la prioridad de
los encargados del bar, y esto hace que se postergue la tarea de desarrollar
planes y estrategias de cara al crecimiento del negocio.
Esto
podría causar que el bar no crezca como se desea, pero aún peor, ciertos
problemas podrían pasar desapercibidos por falta de atención a aspectos más
modulares del negocio.