Fuente: www.vinopack.es
¿Es realmente tan complicado abrir una botella de
vino? ¿Por qué nos sentimos a veces tímid@s de hacerlo? ¿Cada vino exige
un sacacorchos diferente? ¿Existe una técnica orientativa de ayuda?
Antes de aplicar los pasos para abrir la estupenda
botella de vino, necesitamos un aliado esencial, el sacacorchos. Y a
continuación, aplicar al ritual del descorche la delicadeza, destreza y
paciencia que merece, recordando que a mayor edad del vino, mayor cuidado.
Dependiendo del vino y del estado del
tapón se requiere un tipo de
sacacorchos. Sin embargo, el genérico y utilizado por los
profesionales es el sacacorchos de
2 tiempos o impulsos. Utilizaremos este tipo, como ejemplo
para extraer el tapón de la manera más limpia posible. Conviene uno bueno,
simple, ligero y con hélice negra, es decir, bañado en teflón para facilitar la
introducción en el corcho, y con navaja cortacápsulas.
Cómo abrir una botella de vino
1.
Posición correcta. Mantener la botella de vino
en posición vertical inmóvil o
intentando moverla lo menos posible. De esta forma evitaremos que los posibles
posos o sedimentos puedan alterar o enturbiar el vino.
2.
Extraer la cápsula. Utilizaremos el cortacápsulas o cortante del
sacacorchos, para cortar la cápsula por debajo del gollete, es decir del
cuello. Se realiza sin girar la botella. Completamos la circunferencia para
extraer la cápsula que dejará al descubierto el corcho. Limpiamos el gollete y la parte superior del tapón con
un trapo limpio para evitar arrastrar restos metálicos o de
polvo.
3.
Inserción del sacacorchos. Cuidadosamente fijamos el sacacorchos en el centro del tapón. Lo enroscamos hacia la
derecha y se insertará girando poco a poco la hélice en el corcho de la
botella. Pararemos cuando podamos apoyar la palanca corta del sacacorchos para
empezar a sacar la primera mitad del corcho. Automáticamente la otra palanca
queda posicionada.
4.
Extracción del corcho. Realizamos una ligera
presión de la botella sobre la mesa para fijarla. Mientras, sujetamos la palanca corta y muy
despacio, sin hacer ruido con el sacacorchos, extraemos lentamente el
tapón con un sólo movimiento utilizando la palanca larga hacia arriba, tiramos del sacacorchos.
5.
Botella abierta. Finalmente, tendremos el vino
destapado. Limpiaremos con un paño
limpio la boca de la botella, evitando que cualquier resto del corcho
pueda mezclarse con el vino al servirse. Comprobaremos que el vino conserva
todas sus propiedades intactas. Para ello hay que observar la apariencia del tapón. Si se encuentre manchado, que no sea más de un 20% del
corcho. En cuanto al olfato,
el tapón deberá oler a corcho o a vino, nunca a humedad u otros aromas desagradables. Recordemos, que en función de las
deformaciones que observemos en el corcho, el vino estará en mejor o peor
estado.
Hola muy buen articulo, me gusto mucho, yo estoy por realizar un curso de elaboración de vinos y otras bebidas, ya que me lo han recomendado mucho. Pero quiero saber si lo conocen para tener mas referencias.
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